Entendiendo las reglas y las mejores prácticas que garantizan que tu correo electrónico llegue a la bandeja de entrada
La línea entre los correos electrónicos transaccionales y comerciales a veces puede ser ambigua, pero tanto las leyes como las mejores prácticas de la industria para la entrega requieren que algunos aspectos, como el consentimiento y la baja, se traten de maneras muy específicas dependiendo del tipo de mensaje. ¡Esa es la razón por la que el equipo de SparkPost ha creado esta infografía para ayudarte a entender la diferencia entre correo electrónico transaccional y comercial! ¡Es la diferencia en el correo electrónico!
Los correos electrónicos transaccionales se envían en respuesta a la interacción de un usuario con un sitio web o una aplicación y se definen en términos funcionales estrictos. Ejemplos incluyen restablecimientos de contraseña, notificaciones de envío, recibos, avisos legales, y así sucesivamente.
Los correos electrónicos comerciales se envían a una lista de destinatarios que se han suscrito para recibir contenido promocional de tu marca. Ejemplos incluyen ofertas de ventas, boletines informativos, actualizaciones de nuevos productos, correos electrónicos diseñados para aumentar la participación del usuario, y onboarding, etc.
Ya sea que estés enviando un correo electrónico transaccional o uno comercial, asegúrate de que tu mensaje llegue a su destino, se lea y haga una impresión. Seguir algunas sencillas mejores prácticas asegurará que tus correos electrónicos lleguen a sus objetivos—y se mantengan fuera de la carpeta de spam.
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